Mons. Domínguez: 'Aprendamos de Santiago la pasión por Jesús, por el reino y por el Evangelio'

En la fiesta del apóstol, el obispo de San Rafael señaló también: "De él recibimos nosotros la fe y le pedimos para que nos la mantenga, nos la sostenga, nos la fortalezca y nos la acreciente".

La provincia de Mendoza vivió, el jueves 25 de julio, la fiesta patronal de Santiago Apóstol, y la diócesis mendocina de San Rafael también llevó a cabo diversas actividades para honrar al patrono del territorio cuyano.

En ese contexto festivo, el obispo diocesano, monseñor Carlos Domínguez OAR, presidió la Eucaristía en la catedral local.

Al finalizar la celebración eucarística, se realizó la procesión alrededor de la Plaza San Martín y, luego de ella, tuvo lugar el acto en el atrio de la catedral.

Entre los cientos de fieles presentes, participó de la misa, en representación del intendente municipal, Paulo Campi, secretario de Gobierno, junto con autoridades del consulado de España en San Rafael y del Club Español. También estuvo presente la comunidad boliviana, de la cual Santiago también es patrono.

Durante el acto, se entonaron los himnos de la Argentina y de España, hubo discursos de las diversas autoridades y también representaciones artísticas, en las que se lucieron las bailarinas de las escuelas locales de danzas españolas.

               

Durante la misa, monseñor Domínguez expresó: "El apóstol Santiago es uno de esos grandes eslabones que tienen que ver con nuestra propia fe, porque más allá de la fe personal, de cómo la hemos heredado, tenemos que reconocer históricamente que los primeros conquistadores provenientes de España trajeron la fe que él había llevado a la Península ".

"Una de las cosas que tal vez más conmueven -dijo- es pensar que esa fe que nosotros hoy profesamos en nuestra tierra viene directamente de Jesús, el primer eslabón de toda una cadena de testigos, y viene precisamente de alguien que estuvo muy cerca de Jesús, alguien que fue llamado en la primera hora y el primero en dar su vida por Jesús", agregó.

Monseñor Domínguez exhortó a pedir la intercesión de" nuestro patrono Santiago para los temblores telúricos, pero también para nuestra parte espiritual". "La tradición nos cuenta que hay que sacarlo a la calle el día de su fiesta, para que no tiemble nada; nosotros hoy lo vamos a sacar, también para que no nos tiemble el suelo, pero, sobre todo, vamos a pedirle que no nos tiemble lo más importante que tenemos, que es la fe que recibimos de él", destacó.

           

Y señaló: "Que también nos libre de los temblores que producen la envidia y la avaricia, que nos libre de los temblores de la crítica, de la soberbia, de la ansiedad, de la ambición y de la avaricia". "Todo eso que digo son temblores, porque cuando uno los vive, tristemente, le tiembla el corazón, le tiembla la vida entera", enfatizó.

El obispo recordó además: "Vamos a sacar a nuestro santo patrón Santiago para que nuestra vida no tiemble, para que nuestra vida esté apoyada en la roca inamovible que es nuestra fe en Jesús, en Dios, la roca por excelencia, alguien que no se cambia y que siempre permanece".

Sobre el final de su prédica, pidió que el apóstol Santiago "nos proteja, nos bendiga, interceda por nosotros y aprendamos de él también la pasión por Jesús, por el reino y por el Evangelio, y que, desde ese eslabón importante de quien recibimos nosotros la fe, nos la mantenga, nos la sostenga, nos la fortalezca y nos la acreciente".+