Mons. Canecín: "Solo quien sabe ser hijo en el Hijo es capaz de ser hermano de todos"
- 25 de diciembre, 2021
- Goya (Corrientes) (AICA)
En su mensaje de Navidad, el obispo de Goya resaltó el valor de la fraternidad, y la venida de Jesús que nos hace hermanos por participación de la filiación divina.
El obispo de Goya, monseñor Adolfo Ramón Canecín. expresó su cercanía a los fieles con un mensaje navideño inspirado en la encíclica Fratelli Tutti: “Si Dios es nuestro Padre, todo hombre es mi hermano y hacer un mundo humano será la novedad”, manifestó, parafraseando al sacerdote y artista Julián Zini.
Además, recordó la adhesión y participación de diversos modos en la Asamblea Eclesial de América Latina y el Caribe y recalcó que “estamos caminando la fase diocesana del Sínodo sobre la Sinodalidad: Comunión, Participación, Misión”, y comentó que “nos encontramos viviendo el nuevo año pastoral con el lema ‘Vayan, juntos, construyendo fraternidad”.
Con relación a este tiempo, manifestó: “Nuestra madre la Iglesia, a través de la sabia pedagogía litúrgica del Adviento, nos ayuda a vivir el gran acontecimiento de la Navidad: nace el Hijo de Dios, Jesús, Hermano que nos hace hermanos. Por voluntad del Padre, entró en la historia al modo humano, quiso estar en el regazo de una mamá María, y tener el cobijo fuerte de un papá José, consagrando así de modo definitivo el valor de la familia”.
También destacó, a través de distintos pasajes de la Sagrada Escritura que “Jesús manifiesta nuestra identidad más profunda: ¡Ser hijos en el Hijo y participando de su única filiación, tenemos y llamamos a Dios Padre! El Padre envió a nuestro corazón el Espíritu de su Hijo que clama ¡Abba! ¡Padre!”.
Expresó que de esta experiencia vital y existencial de filiación brota la conciencia de que todo ser humano es mi hermano ¡Nace la Fraternidad! “Todos ustedes son hermanos” (Mt 23, 8).
Y añadió: “Solo quien sabe ser hijo en el Hijo es capaz de ser hermano de todos los hombres a la manera de Jesús que nos llamó y trató como hermanos”.
Para concluir, citó las palabras del papa Francisco en la encíclica: “Anhelo que en esta época que nos toca vivir, reconociendo la dignidad de dada persona humana podamos hacer renacer entre todos, un deseo mundial de hermandad. Soñemos como única humanidad, como caminante de la misma carne humana, como hijos de esta misma tierra que nos cobija a todos, cada uno con la riqueza de su fe o de sus convicciones, cada uno con su propia voz todos hermanos”.
“¡Viviendo en Fraternidad, será auténtica Navidad!”, saludó el obispo.+