Miércoles 25 de diciembre de 2024

Los argentinos en Roma agradecen la canonización de Artémides Zatti

  • 7 de octubre, 2022
  • Roma (Italia) (AICA)
La misa de acción de gracias por el nuevo santo será presidida por el cardenal Leonardo Sandri el próximo lunes 10 de octubre, a las 11 (hora de Roma), en la Iglesia Nacional Argentina.
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Los sacerdotes y la comunidad argentina en Roma dará gracias a Dios por la canonización del coadjutor salesiano Artémides Zatti, con una misa presidida por el cardenal Leonardo Sandri.

El cardenal estará acompañado por sacerdotes argentinos residentes en Roma,  como también de la Pía Sociedad de San Francisco de Sales (Salesianos).

Participarán de la celebración la Embajadora Argentina ante la Santa Sede y la Soberana Orden de Malta, María Fernanda Silva, como asi también embajadoras ante la Santa Sede de distintas naciones latinoamericanas.

La celebración eucarística para agradecer al Señor por "las maravillas obradas en su siervo, Artémides Zatti, salesiano" está prevista para el próximo lunes 10 de octubre, a las 11, en la Iglesia Nacional Argentina (Plaza Buenos Aires - 00198 - Roma).

La invitación a participar de la misa de acción de gracias lleva la consigna "Creí, prometí, sané".

Francisco presidirá el rito de canonización
El papa Francisco presidirá el próximo domingo 9 de octubre la celebración eucarística y rito de canonización de Artémides Zatti, “el enfermero santo de la Patagonia o el enfermero de los pobres”.

La canonización está prevista para las 10 (hora de Roma) en la Plaza de San Pedro, y a las 12, los presentes compartirán el rezo del Ángelus con el pontífice. 

El 9 de abril, la Congregación para las Causas de los Santos promulgó el decreto que reconoce el milagro atribuido a la intercesión del beato Artémides Zatti.

Artémides Zatti había sido beatificado por el papa Juan Pablo II en abril de 2002, por un milagro que lograron confirmar dos años antes los médicos de la Congregación para las Causas de los Santos en Roma. 

En 1976, el “Pariente de los Pobres”, como también lo llamaban, comenzaba su camino de santidad por la Conferencia Episcopal Argentina. En 1980 fue declarado Siervo de Dios, y venerable el 17 de julio de 1997. 

Don Zatti murió el 15 de marzo de 1951, tras varios días de agonía. Había dedicado sus últimos 50 años a los enfermos de la capital rionegrina que eligió para vivir y morir, para cumplir la promesa de dedicar su vida a Dios si lograba curarse de la tuberculosis, la misma enfermedad que lo unió con otro santo patagónico, Ceferino Namuncurá. 

Dirigió el hospital salesiano San José, que se erigía en el mismo lugar donde hoy se edifica el obispado de Viedma, y alcanzó a trabajar unos pocos años en el nuevo nosocomio, que con absoluta justicia lleva su nombre.

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