Viernes 15 de noviembre de 2024

Francisco: humildad y generosidad, virtudes de un verdadero artista

  • 18 de enero, 2024
  • Ciudad del Vaticano (AICA)
Con motivo del centenario del famoso Festival de Verona, el Papa recibió a los miembros de la fundación "Arena de Verona" y los animó en su tarea artística.
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El Papa Francisco animó a los artistas, organizadores y voluntarios con el famoso Festival de Verona, a seguir “dando felicidad con el arte, difundiendo serenidad, comunicando armonía”. El pontífice rindió homenaje a esta fiesta centenaria, cuya primera edición tuvo lugar en 1913 y que se celebra cada año en el escenario de la ciudad italiana.

Al recibir este jueves en el Vaticano a unos 300 representantes de este Festival, el pontífice les dijo: “Cien temporadas de actividad artística de altísimo nivel, que recogieron y mantuvieron vivo un precioso patrimonio del pasado, para transmitirlo también más rico para las generaciones futuras”.

La transmisión de un patrimonio “multifacético”
Artístico y patrimonial, Francisco felicitó a los miembros de la fundación por su deseo de transmitir un patrimonio. En primer lugar, por la preservación de un lugar único que es la Arena de Verona. Con 32 metros de altura y capacidad para 22.000 espectadores sentados, el edificio alberga el tercer estadio más grande del mundo, después del Coliseo Romano y el anfiteatro de Capua.

Construidos en el año 30 d.C., los estadios albergaron luchas de gladiadores y luego torneos de caballeros. A lo largo de los siglos, despreciados por los veroneses, corrieron el riesgo “en ciertos momentos de quedar reducidos a una cantera de piedra”, recordó el Papa. La restauración comenzó durante el Renacimiento en el siglo XVI y luego el general francés Sextius Alexandre François de Miollis decidió una restauración moderna en el siglo XVIII.

Luego por la riqueza de su programación artística. Este festival fue pionero en óperas al aire libre y organiza una velada artística casi todos los días entre marzo y septiembre. 

Humildad y generosidad
El Santo Padre rindió homenaje a los esfuerzos compartidos por esta innumerable multitud dedicada al éxito del festival de Verona: "desde quienes construyeron y reconstruyeron las estructuras, hasta los autores y artistas, pasando por los organizadores de los distintos espectáculos y al de todos, muchísimos, quizás los más, que trabajaron, como se suele decir, "entre bastidores". 

Francisco comparó la participación de esta multitud en una obra común que es la fiesta, con lo que dice San Pablo de la Iglesia, explicando que “cada parte es complementaria de las demás en su función específica”.

A través de esta multitud sin rostro, que se esconde detrás de las obras del festival desde hace cien años, el Papa Francisco recuerda " lo importante que es, en el arte como en la vida, ser humilde y generoso". Las dos virtudes del verdadero artista según el Papa.+