Francisco alienta los esfuerzos de la fundación Centesimus Annus
- 5 de junio, 2023
- Ciudad del Vaticano (AICA)
El Santo Padre recibió a los miembros de la fundación Centesimus Annus, a los que agradeció su labor al servicio de la doctrina social de la Iglesia.
El Papa Francisco recibió este lunes 5 de junio, en la Sala Clementina del Vaticano, a los miembros de la Fundación pontificia Centesimus Annus, que celebra este año su trigésimo aniversario con un congreso internacional organizado en Roma.
El objetivo de esta Fundación, que lleva el nombre de la encíclica social de Juan Pablo II firmada en 1991, es el estudio y la difusión de la doctrina social de la Iglesia. Francisco recordó así los valores que porta la fundació,n que son la centralidad de la persona, el bien común, la solidaridad y la subsidiariedad.
“Agradezco a la Fundación y a todos ustedes el valioso trabajo que han realizado; en particular, por lo que han hecho en los últimos diez años, al acoger y revivir las contribuciones que traté de hacer al desarrollo de la doctrina social”, explicó el obispo de Roma, citando sus encíclicas Laudato si' y Fratelli tutti.
El pontífice también abordó la importancia de una economía al servicio del hombre, en lugar de un modelo que ponga el dinero en el centro. “En la exhortación apostólica Evangelii gaudium, quise advertir contra el peligro de vivir la economía de manera malsana”, precisó en ese sentido el Santo Padre.
En Fratelli tutti, Francisco advirtió sobre la necesidad de “enfrentar los efectos destructivos del imperio del dinero: desplazamientos forzados, migraciones dolorosas, tráfico de seres humanos, drogas, guerra o violencia”. Y, al salir de su texto, el Papa se refirió al pasaje del Evangelio donde Jesús explica que no se puede servir a dos señores, a saber, Dios y el dinero. “Tenemos que averiguar qué quiere decir Jesús en esta historia”, explicó: “Hay un mensaje. O sirves a Dios o eres un siervo del dinero, y no eres libre”.
Finalmente, el Obispo de Roma subrayó la importancia de “hacer espacios”, en las diferentes comunidades, “donde los débiles y los sin voz se sientan acogidos y escuchados”. “ Una comunidad que sepa dar voz a los que no la tienen es lo que todos necesitamos”, dijo, y subrayó: “Menos yo y más el otro”
El Papa concluyó finalmente su discurso abriendo esta perspectiva: “La preciosa obra de la Fundación Centesimus Annus también puede ser esta: contribuir al pensamiento y a la acción que favorezcan el crecimiento de una comunidad en la que podamos caminar juntos por el camino de la paz”.+