Sábado 19 de abril de 2025

Es imperativo retomar el camino del desarme, exhortó el Vaticano ante la ONU

  • 10 de abril, 2025
  • Nueva York (Naciones Unidas) (AICA)
Romper la lógica de la disuasión, advirtió el Observador Permanente de la Santa Sede en el discurso que pronunció en la Comisión de Desarme de la ONU, contra la escalada armamentística mundial.
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"La promoción de las armas nucleares sólo ofrece la ilusión de paz", afirmó el arzobispo Gabriele Caccia en su discurso ante la Comisión de Desarme de la ONU en Nueva York. El Observador Permanente de la Santa Sede expresó su alarma ante las crecientes tensiones globales y el aumento de las soluciones militares: "El miedo se ha convertido en el motor de muchas políticas de defensa".

Con una cita de la encíclica Pacem in Terris del Papa Juan XXIII. Caccia recordó que aún hoy el armamento desencadena una carrera peligrosa: cuando un país aumenta su fuerza militar, otros lo siguen por miedo o por competencia: un círculo vicioso que impide la paz a largo plazo.

Peligro de guerra nuclear
Ante la renovada amenaza de una guerra nuclear, el Vaticano pidió urgentemente el desarme. El arzobispo Caccia enfatizó: "Las consecuencias humanitarias y ambientales del uso de armas nucleares serían catastróficas, para las generaciones actuales y futuras". 

Por ello, la Santa Sede invita a los Estados a adherirse al Tratado sobre la Prohibición de las Armas Nucleares (TPNW) y a conducir las próximas negociaciones en el marco del Tratado de No Proliferación Nuclear (NPT) de manera constructiva y confiada.

Otro foco del discurso fue las nuevas tecnologías y la creciente militarización de la inteligencia artificial. Allí, el representante de la Santa Sede pidió la creación de un marco jurídico internacional para "prevenir riesgos existenciales derivados del mal uso de las nuevas tecnologías". La Comisión de Desarme de las Naciones Unidas podría contribuir a la elaboración de futuras normas vinculantes mediante principios y recomendaciones.

Fomentar el diálogo, incluso con interlocutores incómodos
Al concluir su discurso, el Observador Permanente de la Santa Sede citó al Papa Francisco con un llamamiento a la diplomacia: "La vocación de la diplomacia es promover el diálogo con todas las partes, incluso con aquellos considerados interlocutores incómodos. Solo así se pueden romper las cadenas del odio y la venganza".

En un mundo donde el egoísmo, el orgullo y el interés nacional suelen estar en el centro de la acción política, el Vaticano reiteró su firme convicción: "La verdadera paz solo puede surgir a través del diálogo, la confianza y la cooperación global, no mediante amenazas o armas".+