El Papa rezó por el Líbano y pidió a la comunidad internacional ofrecer su ayuda
- 9 de agosto, 2020
- Ciudad del Vaticano (AICA)
"Estén cerca de su pueblo": es la invitación de Papa, dirigida a obispos, sacerdotes y religiosos del Líbano, en este difícil momento que atraviesa "este amado país".
El papa Francisco deseó que el Líbano vuelva a vivir una convivencia “libre y fuerte”, durante el Ángelus de este domingo 9 de agosto de 2020. Pidió a la comunidad internacional una “ayuda generosa”.
Tras la oración mariana que presidió en la plaza de San Pedro, el Papa animó al país, devastado por una doble explosión en Beirut el 5 de agosto: “En estos días pienso a menudo en el Líbano”, dijo el pontífice.
“La catástrofe del martes pasado llama a todos, empezando por los libaneses, a colaborar por el bien común de este querido país”.
“El Líbano”, agregó, “tiene una identidad particular, fruto del encuentro de diferentes culturas, que ha surgido con el tiempo como modelo de convivencia”. Y el Papa deseó: “Por supuesto, esta convivencia ahora es muy frágil, lo sabemos, pero rezo para que, con la ayuda de Dios y la participación leal de todos, pueda renacer libre y fuerte”.
También invitó a la Iglesia libanesa a estar “cerca del pueblo en su Calvario”, con “solidaridad y compasión, con el corazón y las manos abiertas para compartir”. “Por favor”, insistió el Papa, “pido a los obispos, sacerdotes y religiosos del Líbano estar cerca de la gente y vivir con un estilo de vida marcado por la pobreza evangélica, sin lujos, porque su vuestro pueblo sufre, y sufre mucho”.
El país de los cedros cuenta con una población 4,5 millones de habitantes, y la catástrofe del martes pone de rodillas a un país ya afectado por una fuerte crisis económica y social, exacerbada en el último año, que ha reducido a la pobreza a muchas familias.
Tal como informó la Cáritas Italiana, más de una cuarta parte de la población vive con menos de 5 dólares al día. A esto se añade la situación compleja del elevadísimo número de refugiados acogidos en el país: alrededor de un millón, casi todos sirios afectados por una guerra que lleva 10 años, muchos de los cuales no tienen identidad legal: no tienen papeles, ni trabajo, ni derechos. +