El norte neuquino prepara la fiesta de San Sebastián
- 14 de enero, 2019
- Las Ovejas (Neuquén)
La comunidad del norte neuquino se prepara para vivir una nueva fiesta en honor de San Sebastián en Las Ovejas, que cada año congrega a una multitud de fieles. La novena ya comenzó, y se prevén diversas actividades para honrar al santo en comunidad. El párroco de Nuestra Señora del Rosario de Andacollo, en departamento Minas, de la diócesis de Neuquén, presbítero Diego María Canale, envió una carta animando a los fieles a vivir una fe con obras.
Durante los días previos a la fiesta grande, habrá celebraciones especiales: El martes 15 se llevará a cabo la peregrinación comunitaria a pie desde Andacollo a Las Ovejas. El miércoles 16, habrá misa con celebración de bautismos a las 18.30.
El jueves 17 a las 18.30, la misa será para pedir por la salud, y se impartirá el sacramento de la unción a personas mayores y enfermos. El viernes 18 se celebra "San Sebastiancito", una tarde festivo para niños, que comenzará a las 15 y culminará a las 18.30 con una misa.
El sábado 19, víspera de la fiesta de San Sebastián, a las 20.30 arribará la cabalgata. Se rezará la novena y se celebrará misa por las familias y los crianceros. También habrá renovación de promesas matrimoniales. Finalizada la misa, comenzará la noche de vigilia.
El 20 de enero la jornada comenzará a las 6 con un desayuno comunitario para los peregrinos. A las 7 se llevará a cabo la procesión finalizando con la misa en la gruta. A las 11, se celebrará misa en el santuario, y luego los presentes participarán de un almuerzo comunitario. A las 19 se celebrará nuevamente la Eucaristía con bautismos. La jornada finalizará con el Fogón de la Hermandad y el sorteo de premios.
Todas las actividades serán transmitidas por FM San Sebastián.
El párroco de Depto. Minas llamó a vivir una fe con obras
Al comenzar un nuevo año, el párroco de Nuestra Señora del Rosario de Andacollo, en departamento Minas, de la diócesis de Neuquén, presbítero Diego María Canale, envió una carta a los fieles del norte neuquino, en la proximidad de la celebración en honor de San Sebastían.
Para empezar, el presbítero destacó la importancia de llevar una coherencia de fe y de vida, de vivir la fe en obras, con los hermanos que pasan alguna necesidad. "Muéstrame tu fe sin las obras, que yo por mis obras te mostraré la Fe", recordó.
"La Palabra de Dios fue escrita hace mucho tiempo, pero es muy actual; está Viva y es eficaz. ¡Qué lindo es permitirle que mueva nuestros corazones!", exclamó el sacerdote, agradeciendo a Dios por tantos vecinos y vecinas del norte neuquino que día a día se encuentran con la Palabra, que la leen y la interpretan, pero no se quedan en eso nomás, sino que se animan a vivirla.
"El norte neuquino es un pueblo de fe", afirmó el presbítero Canale, y señaló que a lo largo del año, según la Iglesia donde uno participe, "tenemos muchísimas ocasiones para encontrarnos, celebrar y compartir la fe: tenemos los sacramentos, misas, cultos, fiestas patronales, células, novenas, procesiones, encuentros, catequesis, escuelas dominicales, vigilias de oración", lo que constituye "una gran bendición y al mismo tiempo un enorme desafío: Ser cristianos, es decir seguir a Cristo Camino, Verdad y Vida? no seguirlo de pura palabra, sino de verdad y con la vida, anunciarlo y dar testimonio. Ser cristianos en serio es jugarnos a fondo por nuestros hermanos, porque ahí lo encuentro a Cristo", sostuvo.
El sacerdote advirtió que hay muchos vecinos que han dejado de participar en la Iglesia por la falta de testimonio de sus hermanos. En ese sentido, subrayó tres cuestiones fundamentales. "La primera es el fuerte desafío de la coherencia en el orar y el obrar; la segunda es dejar de lado la soberbia que juzga, acusa y señala permanentemente y así optar por la humildad que nos regala el reconocernos frágiles, limitados y pecadores; y la tercera es descubrir que la propuesta es vivir la fe en comunidad, los individualismos no son de Dios", enumeró.
"El desafío es permanecer en la comunidad, aunque por momentos sea doloroso, y encontrarnos en la Escucha de la Palabra para luego vivir comunitariamente en la Práctica de la misma. Preguntarnos ante cada acontecimiento: ¿Qué haría Jesús en mi lugar?", recomendó.
Por eso, llamó a "dejar de ser cristianos de a ratos o cristianos solamente dentro de la Iglesia, cristianos de la boca para afuera, cristianos que esperan milagros del bienestar económico, cristianos individualistas", sino a ser "cristianos que siguen a Cristo, ?quien no consideró su condición Divina, sino que se anonadó a Si mismo tomando la condición de servidor? y actuar en consecuencia".
"Soy Cristiano porque me dejo mirar por Cristo y luego lo miro en mi hermano. Unas palabritas de San Juan: ?Quien dice amar a Dios a quien no ve, y no ama a su hermano a quien ve, es un mentiroso?", recordó.
Finalmente, el sacerdote motivó a los fieles a preguntarse "Si el Señor Jesús viviera en este pueblo, en este paraje: ¿Cómo sería como vecino? ¿Cómo trabajaría? ¿Cómo sería su trato con los demás? Y entonces obrar en consecuencia".
"Así, decididos a ser Cristianos en serio, los invito a vivir este año. Es la oportunidad de nuestra vida, es la respuesta por la que hemos sido creados. No estamos aquí sólo de paso nomás, estamos para algo, somos para Alguien, tenemos una misión: ser como Jesús amando a todos sin excluir a nadie, aborreciendo el odio y construyendo la paz", concluyó.+
