Viernes 15 de noviembre de 2024

El arzobispo de Minsk regresó al país y celebró la Misa de Navidad en la catedral

  • 29 de diciembre, 2020
  • Minsk (Bielorrusia) (AICA)
Tras 4 meses de exilio forzoso, el arzobispo Tadeusz Kondrusiewicz regresó a su patria. Al cruzar la frontera, se arrodilló y besó el suelo bielorruso.
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La Iglesia Católica de Bielorrusia celebró el regreso de su metropolitano, monseñor Tadeusz Kondrusiewicz, quien estuvo cuatro meses en el exilio, lejos de su patria y de su grey. El arzobispo fue acusado de conspirar con fuerzas extranjeras, contra el gobierno de su país.

El prelado logró cruzar la frontera en la mañana del 24 de diciembre. A su llegada a Minsk, en horas de la tarde dio una conferencia de prensa para los periodistas en la catedral del Santísimo Nombre de María.  

Monseñor Kondrusievic dijo que después de cruzar la frontera, pidió al conductor que se detuviera, salió del coche y de rodillas, agradeció a Dios por el regreso, besando el suelo. 

Con la voz quebrada por las lágrimas, el prelado añadió: “¡Es mi tierra! ¡Crecí aquí! Nunca he dicho nada en contra de Bielorrusia, siempre he defendido sus intereses, y lo seguiré haciendo en el futuro”.

El arzobispos explicó las razones de su visita a Polonia, por la que fue acusado  de “ir a recibir órdenes”, según los dichos del presidente Lukashenko. 

“No hay ningún secreto sobre esto: fui a la primera comunión de los hijos de uno de mis parientes. La celebración estaba programada para mayo, pero debido a la pandemia se aplazó. Aproveché la oportunidad para hacerme un chequeo médico, ya que el año pasado tuve una operación muy compleja para estabilizar la columna vertebral. Me dijeron que me controlara de vez en cuando, y ahora estoy bien después de esa operación”.

Durante los meses en Polonia, el arzobispo leyó comentarios sobre la situación en su patria, pero, señaló, “el pastor debe permanecer con los suyos, aunque hoy, gracias a los modernos medios de comunicación, es mucho más fácil mantenerse en contacto”. 

Pudo realizar retiros y conferencias a través de Internet, que han recibido más de 40.000 visitas, “un número enorme de personas, que es difícil de reunir en vivo”.

El traslado a su patria fue posible gracias a las negociaciones entre la nunciatura y el Ministerio de Relaciones Exteriores de Bielorrusia y el arzobispo expresó su gratitud a todos los que le ayudaron a lograrlo.

En la noche del 24 de diciembre, el metropolitano celebró una misa solemne en la catedral. A la celebración asistieron el nuncio apostólico en Bielorrusia, el arzobispo Ante Jozic, y el vicario general de la Arquidiócesis de Minsk-Mogilev, monseñor Jurij Kosobutskij. 

La misa también fue transmitida en línea, para más de 4.000 espectadores. El obispo agradeció al papa Francisco, representado por el nuncio apostólico, por la realización del milagro de su regreso. +