'Dañar la tierra es debilitar la identidad', advirtió Mons. Araya en Pocho
- 4 de octubre, 2024
- Cruz del Eje (Córdoba) (AICA)
El obispo de Cruz del Eje presidió una misa acompañando a los vecinos de la zona, que sufre un incendio forestal que continúa en actividad desde el 19 de septiembre.
"Venimos a rezar y a lamentarnos por lo que generan estos
incendios, con la esperanza de ser consolados por Dios para poder seguir",
expresó el obispo de Cruz del Eje, monseñor Ricardo Araya, al presidir el 2 de
octubre una misa en el departamento Pocho, donde se registra activo un incendio
desde hace dos semanas.
Los incendios forestales en la Provincia de Córdoba dejan
este año una postal muy triste, con miles de hectáreas arrasadas por el fuego.
El foco comenzó en el Parque Provincial Chancaní (Quebrada de La Mermela) y ha
ingresado a jurisdicción del Parque Nacional Traslasierra por el sector
sureste. El combate y las tareas asociadas se están realizando con recursos
provinciales y nacionales.
"A todos les pedimos que no se olviden de los que vivimos en el
norte de Traslasierra, de los que vivimos en los departamentos más despoblados
y necesitados de Córdoba. Vengo a acompañarlos en el rezar y en el dolor",
expresó ante los vecinos de Pocho.
Las necesidades en ese lugar son muchas. Si bien no se han
incendiado viviendas, al quemarse los campos, se hace necesario conseguir
alimento para los animales y reconstruir los alambrados. En ese marco, monseñor
Araya instó a pedir el consuelo de Dios: "Los creyentes entendemos que toda
criatura es una expresión del amor de Dios, es una caricia de Dios. Dios nos
habla cuando sale el sol y también cuando atardece en el campo".
Por eso, advirtió que "dañar la tierra es dañar también su
identidad personal y comunitaria, dañar una historia, debilitar una identidad"
y recalcó que "es necesario no olvidar, sino cuidar, reclamar e impedir que se
repita. Cuidar de la tierra, de la casa común que Dios nos ha prestado, cuidar
de lo que es de todos y de lo propio porque también afecta a todos. Reclamar
ante quien corresponda por lo todo lo justo, reclamar con respeto ante quiénes
tienen la responsabilidad particular de cuidar el bien común material."
"Que la Virgen, que acompaña con corazón de madre, nos
muestre a Jesús y nos siga sosteniendo para que la tristeza no nos venza y
hallemos consuelo: 'Virgen del Milagro, gloria de este pueblo, en quien siempre
halla todo su remedio'", concluyó el obispo.+