Conferencia de prensa en la antesala a la beatificación de los mártires del Zenta
- 2 de julio, 2022
- San Ramón de la Nueva Orán (Salta) (AICA)
Conferencia de prensa presidida por el Card. Semeraro, junto a Mons. Ojea, y el obispo de San Ramón de la Nueva Orán Mons. Luis Scozzina, con motivo de la beatificación de los Mártires del Zenta
Con motivo de los preparativos para la inminente beatificación de los mártires del Zenta, se llevó a cabo una conferencia de prensa en el hotel Alto Verde, encabezada por el cardenal Marcello Semeraro, prefecto del Dicasterio para las Causas de los Santos, quien presidirá la ceremonia de beatificación, junto al obispo de San Isidro y presidente de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), monseñor Oscar Vicente Ojea; y monseñor Luis Antonio Scozzina OFM, obispo de Orán.
Al inicio de la conferencia, el cardenal Semeraro agradeció a todos los presentes y también a todas las personas que estarán presentes en la ceremonia de beatificación de los mártires y a quienes lo harán a través de diferentes canales. También agradeció al intendente de la ciudad de Orán, Pablo González.
En ese sentido, además, el cardenal recordó que hace unos 10 años aproximadamente las beatificaciones se celebraban en la plaza o en la basílica de San Pedro y fue el papa Benedicto XVI quien decidió que las beatificaciones tuvieran lugar en las diócesis, “en la tierra donde los beatos habían vivido, crecido y dado testimonio de su fe, y dando también, en el caso de los mártires, testimonio con la sangre”.
Finalmente, el enviado papal reconoció estar viviendo una experiencia muy fuerte de fe y también al papa Francisco, no solo porque es argentino, sino porque es quien “reconoce la santidad de estos hermanos que serán beatificados”.
Por su parte, monseñor Ojea exclamó que “estoy aquí representando a los obispos argentinos, lo cual para mí es un privilegio y es un día de enorme alegría”. Además, subrayó que “los que más disfrutan de la vida son justamente aquellos que se apasionan dando vida”, y dijo que tanto el sacerdote jujeño Pedro Ortíz de Zárate, como el jesuita Juan Antonio Solinas, “respondieron a sus responsabilidades en la comunidad civil con una experiencia de vida humana extraordinaria".
El presidente de la CEA se refirió de modo particular a Pedro Ortíz de Zárate, quien después de enviudar y aún con dos hijos pequeños decidió consagrarse a Dios, “lo ordenaron sacerdote, párroco de Jujuy y propuso desde aquí internarse en el Chaco salteño con hermanos de los pueblos originarios para proponer la paz propia del reino de Dios. Y allí cuenta con la ayuda de José Antonio Solinas, un sacerdote jesuita, español, que lo acompaña en la misión”.
Continuando con su exposición, monseñor Ojea recordó que ellos murieron por dar testimonio de Jesús y “en el fondo nos recuerda que la vida cristiana fundamentalmente, una vez que recibimos el bautismo, somos testigos y misioneros de Jesús. No hay alegría más grande que la de poder trabajar con Él y trasmitir el Evangelio”. “Esto va a resultar enormemente beneficioso, no solo para la comunidad diocesana de Orán, sino también para todos los argentinos”, continuó.
En tanto, monseñor Scozzina agradeció la presencia del prefecto del Dicasterio para la Causa de los Santos y particularmente al papa Francisco, que “con este gesto del enviado papal para realizar aquí la beatificación nos está diciendo que la opción por las periferias es real en la vida de la Iglesia. Y nosotros podemos decir desde el norte que la periferia es la periferia”, reflexionó. Además, destacó que “esto es un signo y una caricia de Dios para este pueblo que peregrina y esta beatificación viene a renovar la confianza y sobre todo a dar consuelo” a los que están sufriendo de diferentes maneras.
Sobre el final de su reflexión, el obispo de Orán aseguró que para evangelizar “es necesario que haya amor a quienes se evangeliza y esto se refleja muy claramente en estos mártires y en esta comunidad misionera”.+