El arzobispo de Buenos Aires presidió la Misa por la Educación en la catedral metropolitana, donde también animó los presentes a seguir soñando con una Argentina mejor.
El arzobispo de Buenos Aires le pidió a la santa su intercesión para que la sociedad pueda ser curada por Cristo de tanta "contaminación" de intolerancia, de desinformación y de degradación social.
El arzobispo porteño les recordó que la vida pastoral "no es un manual, sino una aventura eucarística", y los animó a vivir su ministerio siendo testigos del Resucitado con alegría y pasión.
Así la definió el arzobispo de Buenos Aires en la misa por su primera fiesta litúrgica, que se celebró frente a la Santa Casa de Ejercicios. Mons. García Cuerva llamó a seguir su camino misionero.