El obispo de San Francisco, en su meditación sobre el evangelio del 11° domingo durante el año, se centró en la oración y la invitación de Jesús a seguirlo.
El obispo de San Francisco, en su meditación sobre la solemnidad de la Santísima Trinidad, se centró en el vínculo personal y libre que nos une con el Creador.
El obispo de San Francisco vinculó la solemnidad de Pentecostés con la Pascua y describió al Espíritu Santo como una "fuerza de reconciliación".
En su reflexión semanal, el obispo de San Francisco se refirió también a la promesa de Jesús de acompañar a sus discípulos hasta el fin de los tiempos.