El Papa recordó este domingo el sufrimiento de las poblaciones de Palestina e Israel y también pidió "no olvidar a la atormentada Ucrania". "Hay mucho dolor allí", dijo.
Al sugerir que la Cuaresma presenta una oportunidad para "la conversión y la renovación interior", Francisco alentó a cuidar a nuestros hermanos más necesitados.
El Secretario de Estado del Vaticano volvió a abordar la situación en Gaza. Aseguró que se está produciendo "una carnicería", con más de 30.000 muertes de civiles palestinos hasta el momento.
"La oración es la fuerza de paz que rompe la espiral del odio, quiebra el círculo de la venganza y abre caminos inesperados de reconciliación", aseguró el pontífice tras el rezo del Ángelus.