Mons. Ángel Macín invitó a poner la confianza en Dios, al considerar que en esta situación extrema por la emergencia hídrica se requiere tener calma, serenidad, sentido común y solidaridad.
Mediante una carta, la Pastoral Social de la arquidiócesis llamó a tomar una "conciencia movilizadora, un compromiso y acciones concretas ante una realidad que nos desafía como pueblo".