El obispo de Posadas se refirió a la esperanza y a la necesidad de convertirnos, tanto en lo individual como en lo social y comunitario, reconciliándonos con Dios y con nuestros hermanos.
El obispo de Santa Rosa animó, en la antesala de la Navidad, a ser "testigos del amor del Señor que todos esperan recibir" y a "allanar el camino para que otros encuentren a Jesús".
"Cada uno de nosotros encarna alguna dimensión de Dios. Ser profeta es ser fiel a esa dimensión y a ese carisma que cada uno encarna en el corazón", aseguró el arzobispo cordobés.
El obispo de Río Cuarto invitó a pedirle a Dios la gracia de "una Navidad donde Jesús pueda nacer verdaderamente en medio de nuestro corazón y en medio de nuestra comunidad".