"No somos de una autoridad pasajera, no somos de un modelo o de una ideología", recordó el arzobispo de Mendoza, al subrayar que el llamado es a vivir según el proyecto que Jesucristo vino a mostrar.
"Dios no es extraño al César, ni el César es extraño a Dios. Lo importante es no mezclarlos", afirmó el arzobispo emérito de Corrientes en su sugerencia para la homilía dominical.