El paso del fenómeno por una amplia franja del este de los Estados Unidos ya causó la muerte de al menos 119 personas. Además, todavía hay cientos de desaparecidos y las comunicaciones están cortadas.
El paso del ciclón por Perú dejó un saldo de 61 muertos, otras 12.200 personas afectadas y 1.326 viviendas destruidas.
"Hay que poner fin a esta violencia, para volver al diálogo", exhortó el cardenal Luis Antonio Tagle, presidente de Caritas Internationalis.
Cáritas estuvo en la primera línea de la crisis del país que comenzó en 2014 y se cobró más de 14 000 vidas y obligó a 1,3 millones de personas a huir de sus hogares.