El arzobispado de Salta publicó un decreto titulado "Las víctimas son lo primero", en el que manifiesta su voluntad de acompañar a las víctimas de abusos sexuales perpetrados por ministros de la Iglesia y de cooperar con la Justicia Penal. En ese sentido, fue aprobado el protocolo de actuación ante las denuncias presentadas por presuntos delitos cometidos por clérigos de la arquidiócesis contra niños, niñas, jóvenes o personas vulnerables.