Queridas Comunidades Educativas
Presente
Quiero llegar a cada Comunidad educativa por medio de estas palabras al comenzar un nuevo ciclo lectivo.
Este año presenta ciertamente nuevos desafíos, en un contexto de incertidumbre y temor también.
Pensando en este momento vienen a mi memoria las palabras del Papa Francisco en la homilía del pasado 2 de febrero. En esa ocasión, dirigiéndose a los consagrados, les habló de la paciencia.
También quiero pedirles que tengan paciencia: paciencia con ustedes mismos, para reconocer y aceptar las limitaciones de cada uno, personal de las escuelas, padres, alumnos; paciencia con los demás, que se acercan a las instituciones con sus propios miedos, problemas...; paciencia con el mundo, para “esperar la luz en la oscuridad de la historia”.
Paciencia que en definitiva es confianza en Dios, en su Misericordia y Providencia; Dios tiene paciencia con cada uno de nosotros y nos pide que aprendamos de Él.
Conozco el gran esfuerzo que están haciendo poniendo todos los medios para cuidarse y los aliento a que lo que sigan haciendo.
Rezo por cada uno de ustedes y los encomiendo de manera especial a San José, en este año dedicado a éL, para que los cuide con su corazón de padre, como supo cuidar al Divino Niño y a la Santísima Virgen.
Los saludo con paternal afecto y les envío mi bendición.
Mons. Juan Alberto Puiggari, arzobispo de Paraná