El arzobispo de Buenos Aires valoró el gesto de estas designaciones del Papa Francisco, para acompañar la acción pastoral en esa jurisdicción eclesiástica, y dio gracias por ello.
El obispo, Mons. Nicolás Baisi, presidió la misa de cuerpo presente en el santuario de la Divina Misericordia, donde el prelado fallecido fue sepultado.
Más de 400 personas participaron, el pasado 15 de junio, de la jornada en el santuario de Río Blanco. Varios ministros renovaron su servicio, y hubo nuevos nombramientos para las comunidades.
Funcionará como casa de retiros, encuentros, convivencias y también como espacio de recuperación de jóvenes con consumos problemáticos. Participaron de las tareas de poda y limpieza unas 200 personas.