"Un día triste para la sociedad", expresó el secretario general del episcopado español, monseñor García Magán.
La situación en Antioquía es dramática. La mitad de la ciudad está destruida. La parroquia católica de San Pedro y San Pablo permaneció en pie y acoge a los desplazados.
El nuevo calendario litúrgico entrará en vigor a partir del próximo 1ero. de septiembre y, según se explica en una nota, se preservará fecha actual de la Pascua.
El responsable de Cáritas Anatolia habló de "daños graves y cuantiosos". "Nos tomó de sorpresa", manifestó. Quedó destruida la pista del aeropuerto de Hatay y varios hospitales resultaron afectados.