Jueves 26 de diciembre de 2024

Mons. Stanovnik afirmó: 'Con Jesús resucitado y vivo, la vida adquiere luz, sentido y dirección'

  • 11 de abril, 2023
  • Corrientes (AICA)
El arzobispo de Corrientes presidió la Vigilia Pascual en la catedral local y animó a celebrar con inmenso gozo la Resurrección de Cristo. "Estamos llamados a ser testigos de ese anuncio", agregó.
Doná a AICA.org

El arzobispo de Corrientes, monseñor Andrés Stanovnik OFM, presidió el Sábado Santo la Vigilia Pascual en la catedral local y ante la presencia de cientos de fieles. 

En la homilía, el prelado recordó: “La Pascua de Resurrección es la fiesta central de cristianismo, la fiesta de las fiestas de nuestra fe. Desde los inicios de la Creación, todo el pasado de la humanidad se ilumina y adquiere sentido desde la Pascua; y a partir de la Pascua se orienta todo el futuro del hombre y de la creación, hasta el fin de los tiempos”.

Asimismo, a la luz de las lecturas compartidas, el prelado señaló: “Iluminados por el Cirio Pascual, que representa a Cristo resucitado, escuchamos en la primera lectura de hoy que Dios creó al hombre varón y mujer. El ser humano no se entiende cabalmente si no es en esa expresión binaria. Por eso, si queremos saber quiénes somos, de dónde venimos y hacia dónde vamos tenemos que preguntarle al que nos creó”. 

En cambio, dijo, “si seguimos pretendiendo arrebatar del árbol de la vida la ciencia del bien y del mal con el propósito de satisfacer nuestros propios intereses, nos seguiremos haciendo el mismo daño que sufrieron Adán y Eva, que desconocieron a Dios y se desconocieron entre ellos”. “Bendita sea la luz del Cirio Pascual, que nos ilumina el camino hacia Cristo resucitado, en quien encontramos todas las respuestas a nuestra condición humana”, agregó.

Asimismo, monseñor Stanovnik señaló que “sin Dios, el hombre queda huérfano del vínculo fundamental que le da sentido a su existencia. Alejado de su Creador, la única seguridad que le queda a la criatura humana es aferrarse a sí misma o, lo que es lo mismo, a las creaciones fantasiosas que se inventa para satisfacer su atormentado vacío existencial”. “En cambio, ¡qué paz y qué gozo experimentan el hombre y la mujer que se sienten amados, perdonados y redimidos por Cristo, vencedor del pecado, de la muerte y del mal!”, exclamó.

Además, señaló que a Dios “no hay que buscarlo entre los muertos, como al hombre tampoco. El Dios de la vida no nos creó para la muerte, sino para la vida. Él tiene las llaves de la vida, por eso, solo en amistad con Dios, la amistad que nos brinda Jesús, tenemos acceso a la verdadera vida, sobre la cual el pecado, la muerte y el mal ya no tienen ningún poder”. 

“Con Jesús, muerto, resucitado y vivo entre nosotros, la vida adquiere luz, sentido, dirección. En Él descubrimos quiénes somos, qué tenemos que hacer y hacia dónde peregrinamos. La convicción con la que la Iglesia predica que es posible la convivencia entre todos los seres humanos, independientemente de su cultura, religión u opción política, se basa en el Misterio Pascual”, reafirmó. 

Finalmente, deseó junto al obispo auxiliar, monseñor José Adolfo Larregain OFM, que la comunidad correntina pueda atravesar una “feliz y santa Pascua de Resurrección”.+

» Texto completo de la homilía