Más llamados a la paz social y a cuidar la democracia
- 3 de septiembre, 2022
- Buenos Aires (AICA)
La Comisión Episcopal de Pastoral Social y los curas villeros exhortaron a construir una patria fraterna desde un diálogo auténtico, al expresar su repudio por el ataque a la vicepresidenta
La Comisión Episcopal de Pastoral Social (Cepas) y los curas villeros sumaron su voz de repudio al ataque contra la vicepresidenta Cristina Fernández, al que coincidieron en calificar como un atentado contra la vida y la democracia; por lo que exhortaron a la paz social y al diálogo auténtico que contribuya a trabajar por un país de hermanos, sin desencuentros ni violencia.
El organismo episcopal que preside monseñor Jorge Rubén Lugones SJ, obispo de Lomas de Zamora, expresó su “más profundo repudio ante los conmocionantes hechos” acaecidos la noche del jueves y acercó su solidaridad y cercanía a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner y a su familia.
“A la par que condenamos este atentado como cualquiera contra la vida humana y la democracia, esperamos un pronto esclarecimiento de los episodios con una eficaz investigación judicial”.
Cepas advirtió con preocupación “una escalada en los discursos de instigación permanente al odio y al desencuentro, en los medios masivos de comunicación, en las redes sociales, en la dirigencia política y social, que nos impide reconocernos como hermanos y dar pasos trascendentes en términos de unidad”.
“No debemos cesar en los esfuerzos que sean necesarios para deponer en nuestra sociedad estas conductas y que podamos construir una patria fraterna desde un auténtico diálogo social”, subrayó citando la encíclica Fratelli tutti del papa Francisco.
Felices los que trabajan por la paz
El Equipo de sacerdotes de villas y barrios populares de Buenos Aires y gran Buenos Aires expresó su solidaridad y cercanía con la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner a raíz del atentado que sufrió la noche del jueves, y al que consideraron “un hecho muy grave que atenta a su vez contra la democracia”.
“Sería un error interpretar el atentado contra la vicepresidenta como un fenómeno aislado. Hay un contexto creciente de desencuentro, polarización, intransigencia, recalentamiento social y crispación que se expresa como una agresividad sin pudor en las redes sociales y los medios de comunicación, y que llega incluso a teñir el accionar de los tres poderes del Estado”, expresaron en una declaración.
Los curas villeros pidieron a Dios que “no crezca la violencia en nuestro país en sus diversas formas”, se comprometieron a ser “sembradores de paz y no de odio” y animaron a ir por “ese camino que tanto necesita nuestra patria”.
“Todos podemos hacer algo para trabajar por la amistad social y debemos empezar hoy. Como nos propone el Papa Francisco nos puede hacer mucho bien recordar las palabras de Martin Luther King, cuando volvía a optar por el amor fraterno aun en medio de las peores persecuciones y humillaciones: Odio por odio sólo intensifica la existencia del odio y del mal en el universo. Si yo te golpeo y tú me golpeas, y te devuelvo el golpe y tú me lo devuelves, y así sucesivamente, es evidente que se llega hasta el infinito. Simplemente nunca termina. En algún lugar, alguien debe tener un poco de sentido, y esa es la persona fuerte. La persona fuerte es la persona que puede romper la cadena del odio, la cadena del mal [...] Alguien debe tener suficiente religión y moral para cortarla e inyectar dentro de la propia estructura del universo ese elemento fuerte y poderoso del amor”.
“Que la Virgen de Luján, la Madre del pueblo, nos ayude a ser sembradores de paz”.+