Viernes 15 de noviembre de 2024

El Papa: 'La Santa Sede trabajará para que niños ucranianos llevados a Rusia sean devueltos'

  • 1 de mayo, 2023
  • Ciudad del Vaticano (AICA)
Francisco compartió sus sensaciones sobre este nuevo viaje apostólico a Hungría: la paz, los contactos con el Kremlin y el diálogo ecuménico.
Doná a AICA.org

El papa Francisco concluyó este domingo 30 de abril su viaje apostólico a Hungría y en el vuelo de regreso de Budapest a Roma respondió preguntas a los periodistas que lo acompañaron en el avión.

Entre los diferentes temas a los que se refirió, el pontífice expresó sus sensaciones sobre su visita a Hungría, los esfuerzos de la Santa Sede para facilitar el regreso a casa de los niños ucranianos llevados a Rusia durante la guerra, la paz, los contactos con el Kremlin y el diálogo ecuménico, al tiempo que hizo una especial mención a su salud tras ser ingresado en el hospital Gemelli la semana anterior al Domingo de Ramos. 

Consultado sobre su primera experiencia de los encuentros con los húngaros en los años '60, tiempo en que muchos jesuitas húngaros habían sido expulsados de su país y llegaron de las escuelas, el papa aseguró que fue “una bella experiencia”. “Me afectó mucho el dolor por ser refugiados y no poder volver a casa. Las monjas de Maximiliano María Kolbe se quedaron allí, escondidas en apartamentos para que el régimen no las echara. Los húngaros que conocí tienen una gran cultura”, expresó.

Luego, el Santo Padre fue consultado sobre si aquel llamamiento que hizo en varias oportunidades a los gobiernos para abrir las puertas a los migrantes, fue un tema de conversación con el primer ministro húngaro, Víktor Orbán.

En ese sentido, el Papa señaló: “El mismo discurso que hice en general, lo hice con Orbán y lo hice un poco en todas partes. Sobre la migración, creo que es un problema que Europa debe tomar en sus manos, porque hay cinco países que son los que más sufren: Chipre, Grecia, Malta, Italia, España, porque son los países mediterráneos y la mayoría desembarca allí”. “Si Europa no se hace cargo de esto, de un reparto justo de los inmigrantes, el problema sólo será de estos países. Creo que Europa debe hacer sentir a la gente que es la Unión Europea incluso frente a esto”, exclamó. 

Por otra parte, el Obispo de Roma fue indagado sobre el diálogo que mantuvo con el primer ministro ucraniano, Denís Shmihal, quien le solicitó ayuda para traer de vuelta a los niños, llevados a la fuerza a Rusia. El papa recordó en este punto que la Santa Sede “actuó como intermediaria en algunas situaciones de intercambio de prisioneros, y a través de la embajada fue bien, creo que esto también puede ir bien. Es importante, la Santa Sede está dispuesta a hacerlo porque es justo, es una cosa justa y hay que ayudar, para que esto no sea un casus belli, sino un caso humano”. 

“Es un problema de humanidad antes que un problema de un botín de guerra o de una transferencia de guerra. Todos los gestos humanos ayudan, pero los gestos de crueldad no ayudan. Debemos hacer todo lo humanamente posible”, agregó.

Y finalizó: “Pienso también en las mujeres que vienen a nuestros países: Italia, España, Polonia, Hungría, tantas mujeres que vienen con hijos y maridos, o son esposas, o están luchando en la guerra. Es verdad que ahora mismo se les está ayudando, pero no debemos perder el entusiasmo por hacerlo, porque si el entusiasmo decae, estas mujeres se quedan sin protección, con el peligro de caer en manos de los buitres que siempre están buscando estas situaciones. Tengamos cuidado de no perder esta tensión de ayuda que tenemos por los refugiados, esto concierne a todos”.+