Episcopado: el laicado argentino celebró sus 40 años de vida institucional

Hubo misas en la sede episcopal, en Luján y en el Sagrado Corazón de Barracas. Se realizaron reconocimientos a quienes fueron fundadores y directores del Deplai y el actual Seplai.

El Secretariado de Laicos de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA) celebró, los días 12, 13 y 14 de diciembre, sus 40 años de vida, haciendo memoria agradecida por el camino recorrido. 

El jueves 12, en la sede episcopal del barrio porteño de Retiro, el padre Sebastián García SCJ presidió la misa que concelebraron el presbítero Agustín Pulitzer y el obispo emérito de San Isidro, monseñor Jorge Casaretto, quien dio testimonio de los motivos que impulsaron la creación de esa nueva realidad de la Iglesia.

El prelado recordó que el objetivo fue darles a los laicos la posibilidad de llevar adelante su misión apostólica bautismal, y así hacer presente en las realidades temporales la Palabra de Dios. 

"Podríamos decir que ya en ese entonces los laicos profundizaron su corresponsabilidad como miembros de la Iglesia, tal como hoy nos lo pide el Papa Francisco", dijo Casaretto.

Luego de la misa, se llevó a cabo un reconocimiento a quienes fueron fundadores y directores del Departamento de Laicos hasta el presente.

Muchos de ellos pudieron reencontrarse y compartir, durante un pequeño ágape, las vivencias de todo ese tiempo de servicio. Participaron el actual Secretariado, ex miembros del Deplai-Seplai, ex directivos y sus familiares, referentes de las regiones del país, miembros de movimientos eclesiales, instituciones y asociaciones, y miembros del área de mujeres.

El viernes, el Secretariado y algunos referentes regionales, viajaron a la ciudad de Luján, a encontrarse con la Virgen y celebrar la eucaristía, presidida por monseñor Oscar Miñarro, obispo auxiliar de Merlo-Moreno, y concelebrada por el padre García, para profundizar la reflexión de lo vivido en estos 40 años. 

Asimismo, tuvieron dos jornadas de trabajo, para proyectar los pasos a seguir, en la parroquia Sagrado Corazón, del barrio porteño de Barracas, donde también compartieron la Eucaristía y dieron gracias por los frutos de este tiempo, que seguirán plasmándose en espacios de comunión, participación y misión laical. 

El laicado reafirmó, así, que los valores de la fraternidad y la solidaridad deben vivenciarse en cada una de las realidades temporales de nuestra patria. 

No faltó la cena del cierre y el brindis agradecido por los 40 años del Departamento de Laicos, actualmente Secretariado Nacional para los Laicos.+