Miércoles 25 de diciembre de 2024

El Papa: 'Los jóvenes no nos necesitan a nosotros, necesitan a Dios'

  • 27 de agosto, 2024
  • Ciudad del Vaticano (AICA)
Al recibir en el Vaticano a los oblatos de San José, Francisco los instó a ayudar a los jóvenes a darse cuenta de la gran necesidad de Dios en sus vidas.
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"Los jóvenes no nos necesitan a nosotros, necesitan a Dios", subrayó el Papa Francisco a los participantes del XVIII Capítulo General de la Congregación de los oblatos de San José, celebrado este lunes en el Vaticano.

Dirigiéndose a los miembros de esa congregación religiosa, fundada por san José Marello en 1878, el Papa recordó: "Como saben, también mi familia tiene raíces en Asti".

"Tenemos, por tanto, orígenes comunes en esa tierra del Piamonte, que vio nacer a su fundador, san José Marello", recordó.

Recordando que el tema del Capítulo es esta frase de San Pablo a Timoteo: "Te recomiendo que reavives el don de Dios que está en ti" (2 Tm 1,6), el Papa afirmó que se trata de "palabras exigentes".

En ellas, reflexionó Francisco, ustedes "se reconocen beneficiarios de un don", es decir, "la santidad de su fundador", y "se comprometen con las responsabilidades que conlleva, para custodiar y hacer fructificar los talentos recibidos, poniéndolos hoy al servicio de los demás".

San José, guardián de la Sagrada Familia
Estas dos actitudes de gratitud y responsabilidad, afirmó el Papa, se reflejan bien en la figura de san José, "el custodio de la Sagrada Familia", que, destacó, "es el modelo, el inspirador y el intercesor de su Congregación".

Reflexionando sobre el amado santo, el pontífice recordó que él mismo conserva una estatua de "san José durmiente" en su habitación.

"Uno de los rasgos más llamativos del santo esposo de María es la fe generosa con la que acogió en su casa y en su vida a un Dios que, contra toda expectativa -se maravilló el Papa- se presentó a su puerta bajo la forma del hijo de una muchacha frágil, sin posibilidad de pretensiones".

Teniendo esto presente, el Papa invitó a cada uno de los oblatos a arraigar su vida de fe y su consagración religiosa en "un cotidiano 'ser' con Jesús".

"Radica tu vida de fe y de consagración religiosa en un cotidiano 'estar' con Jesús", expresó, dirigiéndose a cada uno de los presentes.

Nos sostiene en medio de nuestra fragilidad
Así, observó el Papa -que convocó al Año de San José en 2021-, "es principalmente como san José respondió al inmenso don de tener al Hijo de Dios hecho hombre en su casa: estando con Él, escuchándolo, hablándole y compartiendo con Él la vida cotidiana".

"Cada uno de nosotros, con su propia fragilidad, reconoció el Papa Francisco, no puede mantenerse en pie sin el Señor que nos sostiene".

Por ello, los animó a todos a cultivar siempre una buena vida de oración, a través de la participación en los sacramentos, la escucha y meditación de la Palabra de Dios y la adoración eucarística, tanto personal como comunitaria.

El Papa invitó a los presentes a reflexionar sobre sus propios pecados, y sugirió que todos debemos permanecer muy cerca del Señor para que, cuando empecemos a caer en el pecado, podamos aferrarnos a Él para mantenernos a flote.

Su oración y cercanía a Dios, animó el Papa, "se reflejarán positivamente en su apostolado, especialmente en aquella misión que los caracteriza, como 'apóstoles de los jóvenes'", expresó.

Los jóvenes necesitan a Dios
"Los jóvenes no nos necesitan a nosotros, necesitan a Dios", subrayó el Papa Francisco, y añadió: "Cuanto más vivimos en su presencia, más capaces somos de ayudar a los demás a encontrarlo". Los jóvenes, recordó el Papa, tienen un gran potencial de bien, "esperando florecer y dar fruto, si son sostenidos y acompañados por guías sabios, pacientes y generosos".

Si bien "es una gran tarea que requiere mucho trabajo", afirmó que, sobre todo en nuestros tiempos, eso sigue siendo "indispensable".

El Obispo de Roma concluyó agradeciendo a los oblatos de San José por su servicio y generosidad a la Iglesia y a la sociedad.+