Miércoles 25 de diciembre de 2024

El Papa en Verona: 'la paz surge del diálogo y no de la ideología'

  • 18 de mayo, 2024
  • Verona (Italia) (AICA)
En el marco de su visita a Verona, Francisco alentó este sábado a la gente común a tomar la causa de la paz en sus manos en lugar de esperar a los líderes mundiales.
Doná a AICA.org

Donde hay vida, también hay conflictos y tensiones. Es un hecho, recordó el Papa Francisco este sábado en la Arena de Verona, respondiendo a las preguntas de algunos representantes de las distintas mesas de trabajo que participaron en el encuentro "Arena de la Paz - Justicia y Paz se besarán".

Unas 12.500 personas se reunieron para el acto, en el antiguo anfiteatro romano, el Papa respondió a varias preguntas de las personas que participaron en varias mesas redondas centradas en temas que van desde la migración a la economía y desde el medio ambiente al desarme.

La autoridad requiere participación, no un 'héroe'
La primera pregunta se la hizo al pontífice, Mahbouba Seraj, una mujer afgana de Kabul, quien le preguntó qué tipo de liderazgo se necesita para construir la paz.

Francisco respondió destacando los efectos negativos del individualismo en la conciencia colectiva de una sociedad, diciendo que el individualismo conduce a una distorsión de la autoridad como figura de “héroe”.

Una visión adecuada de la autoridad, añadió el Papa, requiere la participación de todos los miembros de la sociedad.

“La autoridad necesaria para construir procesos de paz sólidos sabe valorar lo bueno de cada uno, sabe confiar y así permite que las personas se sientan capaces de hacer un aporte significativo”, afirmó.

Al lado de los migrantes
La segunda pregunta la hizo Elda Baggio de “Médicos Sin Fronteras”, quien le preguntó sobre la necesidad de apoyar a las víctimas de la migración forzada.

El Santo Padre recordó que el Evangelio exhorta a los cristianos a “estar junto a los pequeños, los débiles, los olvidados”.

Jesús, dijo, pone en el centro a quienes están marginados de la sociedad, invitándolos a dar testimonio de la posibilidad de dejar de lado los prejuicios.

“Para poner fin a todas las formas de guerra y violencia -dijo- debemos apoyar a los más pequeños, respetar su dignidad, escucharlos y garantizar que su voz pueda ser escuchada sin ser filtrada”.

El Papa llamó a la sociedad a someterse a una conversión para garantizar que los inmigrantes sean tratados con justicia, dejando de lado aquellas partes de nuestro estilo de vida que buscan evitar a las personas que sufren.

Hay que cuidar la paz
La tercera pregunta se centró en el medioambiente y fue planteada por Annamaria Panarotto, quien preguntó al Papa cómo los activistas pueden presionar a los políticos para construir relaciones de justicia.

Francisco respondió que nuestra sociedad está llena de una tensión entre hacer las cosas rápidamente y nuestra conciencia de que esa velocidad no es natural, y alentó a la gente a "reducir el ritmo" para aceptar la necesidad de "cuidar la paz".

“La paz se construye a través del diálogo y del reconocimiento de los demás”, afirmó.

Abrazar las tensiones en lugar de reprimirlas
La cuarta pregunta fue planteada por Andrea Riccardi, fundador de la Comunidad de San Egidio, y Sergio Paronetto de Pax Christi, quienes juntos preguntaron a Francisco sobre la necesidad de escuchar a los demás para construir la paz.

El Papa animó a todos a "abrazar una pluralidad de ideas, en lugar de intentar uniformar todo. Tratar de ocultar las tensiones -dijo-, sólo termina haciéndolas estallar de una manera más violenta".

“El primer paso para vivir sanamente las tensiones y los conflictos es reconocer que son parte de nuestra vida, son fisiológicos, siempre y cuando no traspasen el umbral de la violencia”, afirmó. “Por lo tanto, no les teman. No temas si hay diferentes ideas que se enfrentan y quizás chocan”.

Testigos del dolor y la reconciliación
La última pregunta fue planteada por Maoz Inon, un israelí cuyos padres fueron asesinados en el ataque de Hamás el 7 de octubre de 2023, y Aziz Sarah, un palestino cuyo hermano fue asesinado en Gaza.

Mientras los dos hombres se abrazaban en señal de afecto fraternal, el Papa y la multitud aplaudieron largamente por reconocer el dolor compartido por la guerra en Tierra Santa.

El pontífice dijo que no había palabras que pudieran expresar el poder de su testimonio e invitó a todos a hacer una pausa por un momento para orar por la paz.

La paz depende de la gente normal
En conclusión, el Papa Francisco expresó su convicción de que el camino hacia la paz depende de la gente corriente y no de los poderosos.

“Estoy cada vez más convencido -dijo- de que el futuro de la humanidad no está sólo en manos de grandes líderes, grandes potencias y élites. Está sobre todo en manos de los pueblos; en su capacidad de organizarse”, y concluyó recordando que la paz surge del diálogo y no de la ideología.+