El Opus Dei adecuará los estatutos de la Obra a las nuevas directivas papales
- 6 de octubre, 2022
- Roma (Italia) (AICA)
El prelado Fernando Ocáriz anunció la realización de un Congreso General Extraordinario para el primer semestre de 2023, a fin de hacerlo sobre las bases del motu proprio "Ad charisma tuendum".
El prelado del Opus Dei, Fernando Ocáriz, comunicó que en el primer semestre del 2023 convocará un Congreso General Extraordinario, para llevar a cabo la adecuación de los estatutos de la Obra fundada por san Josemaría Escrivá de Balaguer a las indicaciones del motu proprio Ad charisma tuendum, que entró en vigor el 4 de agosto pasado.
“¡Que Jesús me guarde a mis hijas y a mis hijos!”, así comienza la carta que la máxima autoridad del Opus Dei remitió a los fieles de la Prelatura, publicada este jueves 6 de octubre.
En la misiva, Ocáriz recuerda que el Dicasterio para el Clero, institución de la que ahora depende la competencia de todo lo que corresponde a la Sede Apostólica en materia de prelaturas personales desde la constitución apostólica Praedicate Evangelium, aconsejó al Opus Dei no limitarse a "considerar lo que se refiere a la dependencia de la Prelatura a este Dicasterio y al paso de quinquenal a anual del informe a la Santa Sede sobre la actividad de la Prelatura, sino que propongamos otros posibles retoques a los Estatutos, que nos parezcan convenientes a la luz del motu proprio".
Tratándose de una iniciativa de la Santa Sede, el Prelado aclaró que "no hay que celebrar los Congresos Generales previstos para introducir cambios en los Estatutos. Sin embargo, con el parecer favorable de la Asesoría Central y del Consejo General, convocaré un Congreso General Extraordinario con esa precisa y limitada finalidad, que tendrá lugar en el primer semestre del 2023".
Asimismo, añadió que para preparar el trabajo de quienes sean congresistas, será necesario contar, con suficiente antelación, con los aportes de quienes deseen enviar sugerencias concretas. En este sentido, Ocáriz adelantaó que próximamente llegarán orientaciones sobre el modo y el tiempo para enviárselas, a fin de que se facilite su estudio.
Ocáriz solicitó tener en cuenta "que se trata de cumplir lo que indicó la Santa Sede, no de proponer cualquier cambio que nos pudiese parecer interesante. Junto al deseo de ser fieles a la herencia de nuestro fundador, es importante considerar el bien general que supone la estabilidad jurídica de las instituciones".
"Naturalmente, agregó, el texto del motu proprio puede suscitar otras sugerencias, aparte de lo relativo a los Estatutos, para dar nuevo impulso a las labores apostólicas. Se las pedirán más adelante, cuando se convoquen las futuras semanas de trabajo".
La nota finalizó encomendando este proceso a la intercesión del fundador, en el día que se celebra el vigésimo aniversario de su canonización, ocurrida el 6 de octubre de 2002. Ocáriz animó a pedir al Señor "que fructifique con renovada fuerza en la vida de cada uno -como nos pidió el papa Francisco- el carisma que Dios confió a nuestro Padre en servicio de la Iglesia".
El motu proprio de Francisco
Ad charisma tuendum ("Para tutelar el carisma") es un documento que "desarrolla y concreta el cambio producido por la constitución apostólica Praedicate Evangelium, al transferir las competencias en materia de prelaturas personales del Dicasterio de los Obispos al del Clero", como bien explica la sección de preguntas y respuestas sobre el motu proprio elaborada por la Oficina de Información de la Obra.
"Tanto el título como la introducción traslucen la determinación del Santo Padre para que este cambio sea llevado a cabo en el pleno respeto del carisma del Opus Dei", especifican en el sitio web.
Sobre el hecho de que el documento dispone que el Prelado no es más obispo, la Obra destaca que "se trata de una iniciativa y decisión de la Santa Sede, en el marco de una reestructuración del gobierno de la Curia, para reforzar -como dice el motu proprio- la dimensión carismática".
Respecto al vínculo entre carisma y jerarquía, un aspecto importante del documento, se subraya: "El carisma del Opus Dei consiste en ayudar espiritualmente a todas las personas, hombres y mujeres, de todas las procedencias y de cualquier profesión, a que se santifiquen ahí donde están, y a ayudarles a propagar la llamada universal a la santidad en medio del mundo, con el único título de haber sido bautizados. Por tanto, los fieles de la Prelatura no forman ni actúan en grupo por el hecho de pertenecer al Opus Dei. El carisma del Opus Dei tiene necesidad del ministerio sacerdotal: aquí es donde es necesario que intervenga la jerarquía. Por ese motivo, como recuerda ahora el papa Francisco, “para tutelar el carisma, mi predecesor san Juan Pablo II, en la constitución apostólica Ut sit, de 28 de noviembre de 1982, erigió la Prelatura del Opus Dei, confiándole la tarea pastoral de contribuir en modo peculiar a la misión evangelizadora de la Iglesia”. Con la progresiva maduración y asimilación de las enseñanzas conciliares sobre los dones jerárquicos y carismáticos se irá entendiendo cada vez mejor como, lejos de una oposición entre ambos, en el Opus Dei son realidades complementarias".+