Ángelus: el Jubileo, una oportunidad para renovar el encuentro con Cristo

En sus palabras previas a la oración mariana, el Papa invitó a "dirigirnos con confianza a María, Madre de Dios y Madre nuestra, para que nos ayude a reconocer a Jesús".

El Papa Francisco reiteró este 26 de enero, Domingo de la Palabra de Dios, que este Año Jubilar es una oportunidad para que los cristianos reconozcamos nuestra necesidad de salvación y renovemos nuestro encuentro con Cristo.

Dirigiéndose a los fieles antes del rezo del Ángelus dominical, desde la ventana del Palacio Apostólico, el pontífice reflexionó sobre el pasaje del Evangelio de san Lucas que narra la visita de Jesús a la sinagoga de Nazaret, y señaló el momento en que Él declaró que se había cumplido la profecía de Isaías, una declaración que sorprendió y desafió a sus oyentes.

El Papa explicó que este momento plantea a los conciudadanos de Jesús una pregunta decisiva: "¿Es Él sólo el hijo del carpintero,  que se arroga un papel que no le corresponde, o es verdaderamente el Mesías, enviado por Dios, para salvar al pueblo del pecado y de todo mal?".

Imaginemos el estupor y el desconcierto de la gente de Nazaret, añadió: "Pensaban que lo conocían demasiado bien y esto, en lugar de facilitarles la apertura de la mente y del corazón, les impedía hacerlo, como un velo que oscurece la luz".

Un desafío atemporal
También hoy, afirmó el Papa, este pasaje evangélico invita a los creyentes a confrontarse con la propia comprensión de Jesús.

"Este acontecimiento nos sucede también a nosotros hoy", afirmó, señalando que también nosotros podemos caer en la trampa de pensar que ya conocemos a Jesús.

"Hemos crecido con Él, en la escuela, en la parroquia, en el catecismo, en un país de cultura católica... Y, por eso, también para nosotros es una Persona cercana, 'demasiado' cercana", afirmó.

El Obispo de Roma invitó a los cristianos a preguntarse si reconocen verdaderamente a Jesús como Hijo de Dios y Salvador.

"¿Sentimos la autoridad única con la que habla Jesús de Nazaret?, ¿reconocemos que Él es portador de un anuncio de salvación que ningún otro nos puede dar?", se preguntó.

Por ello, Francisco invitó a reflexionar sobre nuestra necesidad de salvación y explicó que, sólo cuando la reconozcamos, podrá este año ser un Año de Gracia.

Volverse hacia María
El Santo Padre concluyó animando a los fieles a buscar la guía de María, la Madre de Dios.

"Dirijámonos con confianza a María, Madre de Dios y Madre nuestra, para que nos ayude a reconocer a Jesús", concluyó.+