Convocados por el maestro general, los referentes de las distintas áreas y regiones de la Orden de la Merced se encontraron en un espacio de discernimiento y compartir comunitario.
El Papa Francisco se dirigió a la Unión de Superiores Generales al final de su Asamblea con una reflexión sobre lo que significa ser un pacificador y sobre la importancia de fomentar la sinodalidad.
Al final de la Asamblea de la UISG, Francisco animó a los superiores religiosos a cumplir con su servicio sin temor a la propia vulnerabilidad y con espíritu de constructores de comunidad.
Un año después del inicio de la pandemia, los religiosos agradecen a Dios por la generosidad con la que tantos religiosos entregaron su esfuerzo, incluso su vida para cuidar a los afectados.