A un año del devastador ataque de Hamás en Israel, les escribió una carta a los fieles de la región, exhortándolos a la oración, el ayuno y la convivencia pacífica.
El pontífice encabezó la oración por la paz en la Basílica de San Pedro, a la que se sumaron creyentes de todo el mundo, y pidió que María nos enseñe a "acoger y cuidar toda vida humana".