Al recibir a una delegación de la Federación Luterana Mundial, el Santo Padre describió su visita como "un gesto importante de fraternidad ecuménica".
Bajo el lema: "Levanto mis ojos a las montañas", la arquidiócesis de Munich y la Iglesia Evangélica Luterana de Baviera rezarán juntas en la capilla del glaciar Zugspitz.
Al recibir a los representantes de la Federación Luterana Mundial, el Papa animó a quienes están comprometidos en el diálogo católico-luterano a ponerle pasión a la búsqueda de una mayor unidad.