Durante la Misa de la Cena del Señor, los prelados recordaron la lección de humildad que dio Cristo a los apóstoles, y animaron a reflexionar sobre la comunión con los hermanos.
El arzobispo de Buenos Aires presidió la misa de la Cena del Señor en la parroquia San Enrique. Acompañado por el párroco Esteban Sacchi, realizó el lavatorio de los pies a fieles de la comunidad.
El arzobispo platense realizó el gesto característico del Jueves Santo a niños que se encuentran internados y también a algunos hijos del personal médico y de enfermería de ese hospital.
Francisco presidió la Misa in Cena Domini en la prisión para mujeres de Rebibbia, en Roma. Ante reclusas y personal penitenciario, insistió en la necesidad de imitar a Jesús en la vocación de servicio