"Las leyes están para la convivencia, para la armonía social y en ésta, Dios tiene un rol preeminente, como garante", recordó el arzobispo de Mendoza.
El papa Francisco mantuvo este jueves un encuentro en la Sala Clementina con los nuncios apostólicos del mundo, a quienes les presentó una "especie de decálogo" recordándoles que son hombres de Dios, de la Iglesia, de celo apostólico, de reconciliación, del Papa, de iniciativa, de obediencia, de oración, de caridad operosa y de humildad.
Durante la audiencia general de hoy, miércoles 21 de noviembre, celebrada en la Plaza de San Pedro ante unas 11 mil personas, el papa Francisco, recordó que "Dios es el único capaz de renovar nuestro corazón", siempre que nosotros lo abramos también. "Es la única condición, dijo el Papa, Él hace todo, pero debemos abrirle nuestro corazón", aseguró el pontífice en la última parte de la catequesis, dedicada al último mandamiento: No codiciarás los bienes ajenos.
"¿Cómo puede ser terapéutico, civil o simplemente humano un acto que suprime la vida inocente e indefensa en el útero materno o en su nacimiento? ¿Es justo quitar una vida humana para resolver un problema? ¿Es justo pagar a un sicario para resolver un problema? No se puede, no es justo quitar la vida a un ser humano, incluso pequeño, para resolver un problema", afirmó contundente el papa Francisco en la mañana de hoy durante su catequesis de la Audiencia General dedicada al quinto mandamiento: "No matarás".