Al finalizar la Jornada Mundial de la Juventud, que reunió en Panamá al papa Francisco con cientos de miles de jóvenes, las autoridades eclesiásticas del país anfitrión presentaron el balance de la Jornada.
"Ser santos no es un mito, es una realidad palpable", dijo monseñor José Domingo Ulloa Mendieta OSA, arzobispo de Panamá, al iniciar esta tarde la 31° Jornada Mundial de la Juventud en la Ciudad de Panamá. El Comité Organizador Local (COL) informó que asistieron aproximadamente 75.000 personas, de más de 140 países, entre obispos, sacerdotes, peregrinos y voluntarios.