"El lugar donde estoy, aquí donde Dios me pone, es el mejor lugar del mundo", expresó el prefecto de la Doctrina de la Fe en la parroquia de la localidad cordobesa de Alcira Gigena.
El obispo de Catamarca celebró la misa en la catedral y remarcó la importancia de vivir la Navidad "no como un recuerdo" sino como "un hecho de nuestro hoy".
En la misa de Nochebuena, el Santo Padre habló de la pequeñez como el camino elegido por Dios para llegar a nosotros.
El arzobispo de San Juan y secretario general del Celam invitó a que a ese dejo de tristeza de la Nochebuena se le añada "un grito de esperanza. Porque la Navidad es también misterio de esperanza".