Obispos, sacerdotes, religiosos y religiosas, las Cáritas diocesanas, las parroquias como centro de acopio y ayuda, y cientos de voluntarios, se hallan movilizados para ayudar a los damnificados.
"Rezo por ustedes. ¡Que Dios los bendiga a todos!", dijo Francisco, solidarizándose con las víctimas de la DANA, que provocó inundaciones en varias localidades de la costa española.