Fue a raíz del fallo del máximo tribunal en la causa que una pareja de varones subrogantes, exigían desconocer la maternidad de quien gestó y dio a luz a su hijo y registrarse ellos solos como padres.
Durante una reunión en Ginebra, la subsecretaria de Bioética del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida pidió una vez más la prohibición internacional del llamado "alquiler de vientres".