Militantes del régimen de Nicolás Maduro, interrumpieron la homilía de Mons. Jesús González de Zárate durante una misa en Cumanacoa, en la que se entregaba ayuda a damnificados por las lluvias.
El Santo Padre condenó el atentado en una parroquia en que se estaba celebrando la misa y en el que fueron asesinadas quince personas.
Después del rezo del Ángelus, Francisco condenó el ataque ocurrido la mañana del domingo 28 de enero en una parroquia italiana en la capital de Turquía, donde al menos murió una persona.