Así tituló el arzobispo de San Juan de Cuyo y secretario general del CELAM su columna para este domingo 12 de febrero, relacionada sobre todo con la Jornada Mundial del Enfermo.
El arzobispo de San Juan de Cuyo y secretario general del Celam evocó al purpurado -fallecido en 1998 y declarado venerable el año pasado- en ocasión de un nuevo aniversario de su muerte.