"Gracias por estos seis años de ministerio pastoral que nos permitió vivir juntos a lo largo y lo ancho de todo el territorio diocesano. Los voy a extrañar mucho", expresó durante la homilía.
El administrador arquidiocesano de La Plata agradeció el acompañamiento y la predisposición del clero, al tiempo que valoró su vocación de servicio y el espíritu de unión fraterna y la calidez.
En la misa de acción de gracias por su ministerio pastoral, el obispo de Rafaela se despidió de la diócesis tras 9 años de servicio. Lo sucederá en el cargo monseñor Pedro Torres.