"El mundo está en grave crisis desde hace 15 años", señaló Francisco a los participantes en el encuentro de Deloitte Global y subrayó que se necesita "una nueva generación de consultores".
Al recibir las cartas credenciales de nueve representantes diplomáticos, el Papa consideró que urge atender los problemas de la migración y el cambio climático, además de la deuda externa.