Así lo destacó el delegado episcopal para las Causas de los Santos, monseñor Santiago Olivera, al referirse a la reciente beatificación del fraile franciscano y Orador de la Constitución.
En el paraje El Suncho, departamento de La Paz, lugar donde falleció fray Esquiú, celebraron su beatificación. Hubo una vigilia y una misa de acción de gracias.
Luego de la beatificación de fray Esquiú, en la tarde del sábado se celebró una misa de acción de gracias en la iglesia San Francisco, de la capital, y se bendijo el altar dedicado al fraile.
El fraile franciscano fue proclamado beato en una celebración eucarística en Catamarca presidida por el legado papal, cardenal Luis Villalba. La fiesta litúrgica será el 11 de mayo.