El arzobispo emérito de Corrientes, monseñor Domingo Salvador Castagna, consideró que es "preciso revitalizar la fe, formalmente profesada", al advertir que "no se puede vivir en la incoherencia y menos aún en la mentira". "Si nos declaramos cristianos, debemos vivir como tales y adoptar un comportamiento personal y social que se muestre fiel a los mandamientos y a los valores evangélicos", sostuvo.