"La ?compra de conciencias? incluye un doble atentado, contra la libertad de opción y contra la ética y cultura política de los ciudadanos: a saber, el prebendismo que somete indignamente a frágiles voluntades y el fanatismo que prohíbe todo sano razonamiento", advirtió el arzobispo emérito de Corrientes, monseñor Domingo Salvador Castagna, al referirse a la conquista de votantes mediante artilugios non santos.