En su mensaje de Navidad, el arzobispo de Bahía Blanca, monseñor Carlos Alfonso Azpiroz Costa OP, sugirió súplicas propias de las circunstancias de este tiempo: "Señor Jesús, quiebra nuestra sordera, ayúdanos a escuchar el grito de los pobres, y el grito de la tierra", "Ayúdanos Señor a ser constructores de la ?cultura del encuentro?" y "Señor Jesús, que a nadie falte trabajo y el pan en su mesa".
Con el lema "Belén, puerta de vida y esperanza", los días 14, 15 y 16 de diciembre la Pastoral de Juventud de San Isidro llevó a cabo la segunda misión diocesana que reunió cerca de veinte jóvenes en la parroquia Nuestra Señora de Aránzazu. El objetivo de la misión fue salir del esquema "tradicional" y realizar gestos misioneros y visitas a las obras parroquiales, con un contacto más espontáneo con la comunidad.
El obispo de Cruz del Eje, monseñor Ricardo Araya, expresó mediante un video sus deseos para la Navidad que se aproxima. "Ojalá podamos abrir la puerta y dejar entrar la luz y la paz de Jesús", anheló el prelado.
"En esta Navidad la esperanza sos vos, que podés tener un amor lleno de ternura con los que te rodean, compartiendo algo tuyo para que otros, inclusive lejos de donde vives, puedan sentir que vivís en un mundo de seres humanos, y no en una jungla, donde rige la ley del ?sálvese el que pueda?", aseguró el presidente de Cáritas Argentina, monseñor Carlos José Tissera, obispo de Quilmes, en su saludo navideño.