Con motivo de la fiesta de San Juan de Capistrano, patrono de los capellanes castrenses, monseñor Santiago Olivera, obispo castrense, envió un mensaje a los capellanes y los invitó a "renovar y avivar el deseo de santidad". "La alegría del sacerdote es incorruptible, aunque pueda pasar por momentos difíciles," les dijo.