"No nos es lícito mirar para otro lado y eludir hoy, irresponsablemente, nuestra personal misión. Cristo reclama, de los cristianos, que nos enfrentemos con la escabrosa realidad y no temamos aplicarle la adecuada medicina de los valores evangélicos", aseguró el arzobispo emérito de Corrientes, monseñor Domingo Salvador Castagna.