Ocurrió mientras regresaban de una visita a las iglesias de Nuestra Señora de Aparecida del Beato Donizetti, en Tambaú, y del Buen Señor de los Afligidos, en Pirassununga.
En un telegrama, el pontífice expresó sus condolencias por el siniestro, que tuvo lugar el miércoles 15 de febrero.
En un telegrama, Francisco expresa oración y cercanía por el drama vivido la noche del domingo en el estado africano, con decenas de heridos.
En un ómnibus que quedó enterrado por el derrumbe de lodo en la Vía Puerto Rico, murieron 34 personas (9 de ellas, menores).